jueves, 8 de marzo de 2012

HENRY PURCELL


¿Conocéis la maravillosa música de Purcell?
Se trata de un compositor del barroco temprano, considerado el mejor músico británico de todos los tiempos.
Siempre he sentido gran afecto por los músicos barrocos. Ejercían su arte como un oficio, con modestia, sin pretensiones, con una suerte de alegría todavía lejana de los “artistas atormentados” (Y, como decirlo… algo “estreñidos”) del romanticismo.
Comencé escuchando a los más consagrados como Bach, Haendel, Vivaldi, etc y  los encontré geniales, pero cuando “conocí” a Purcell me pareció que ninguno tenia  la frescura, la inspiración, la ligereza, la imaginación y la solemnidad de este. Quede claro que se trata de la opinión de un mero “escuchador” de música con muy pocos conocimientos tecnicos, pero que demonios… ¿No dicen los americanos que la opinión es como el culo, que todo el mundo tiene uno?
Los críticos de cine decían de Billy Wilder que era incapaz de hacer una película aburrida. Pues bien, puedo decir que no he escuchado un solo fragmento musical de Purcell que me haya resultado aburrido, aun siendo muy prolífico y tocando muchos palos. Pero todos los tocaba bien: desde la musica orquestal, para cuerdas, clavecín, religiosa, profana, canciones populares y sobre todo la música para la escena: Operas como “Dido y Eneas”  y  semi-operas como “La reina de las hadas”, “La Mascara de Diocleciano”, “Rey Arturo“, “La Tempestad”  y otras.
Murió a los 36 años. No se si es demasiado verosímil la leyenda que asegura que tras una noche de farra, su esposa no le permitió la entrada en el domicilio conyugal, y falleció a causa de una pulmonía contraída tras pasar la noche a la intemperie.  
Si vais a Londres encontrareis su tumba bajo el órgano de la Abadía de Westminster, de la que fue maestro de capilla.
                 En fin, la selección que sigue no es mas que una pequeña muestra de las habilidades de este extraordinario músico. Os animo a profundizar en su obra. No os decepcionará



              Este primer video es el Rondó de la Suite para la obra escénica “Abdelazer” interpretado por un conjunto de cuerda en San Sebastian. Quizá os resulte familiar porque es la base de la famosa pieza sinfónica “Guia de Orquesta para Jóvenes” de Benjamin Britten, otro inglés ilustre, este contemporáneo. 



Este corte pertenece a “Rey Arturo”. En esta obra, como corresponde a la epica arturica, hay muchos magos, genios y todo eso. El Genio del Hielo, despertado por un mago enemigo de Arturo, clama por volver a su gélido letargo.  
La interpretación, en 1982, es del fallecido contrátenor alemán Klaus Nomi. ¿Verdad que casi se siente el frío al escucharlo?  


                      Aquí se trata del Pasacalle de “Rey Arturo” interpretado por el English Baroque dirigido al clavecín por el prestigioso Trevor Pinnock. Lo he seleccionado porque creo que muestra en poco espacio toda la grandeza de los recursos musicales de Purcell: Orquesta, Vocal, Coros, etc.



     Ahí queda la majestuosa Tonada de Trompeta. El intérprete es el señor de la foto, Maurice André, uno de los grandes de la trompeta barroca, fallecido recientemente en el país vasco francés. Se mostraba contrario a la música moderna porque le recordaba, decía, “el ruido de la mina en la que había trabajado de joven”



Quizás os suene de la Banda Sonora de “La Naranja Mecánica”. Se trata de la Marcha Fúnebre de la música escrita por Purcell para los Funerales de la Reina Mary II en 1694. Imprescindible la escucha de la obra completa (Es corta) para los amantes de la música religiosa.




Pero Purcell, excelente compositor de música religiosa, también sabia descender a las tabernas y a las canciones populares con la gente del pueblo. Aquí van dos tomas distintas de un mismo fragmento de “Rey Arturo”. Se trata de “Old England”, pieza de evidente raíz popular y ardor patriótico. Ambas, dirigidas por dos popes del nuevo barroco con instrumentos originales.
La primera, dirigida por John Eliot Gardiner pertenece a una película biográfica titulada “England my England – The Story of Henry Purcell”.
La segunda no es una opera-rock aunque lo parezca (Se puede discutir la puesta en escena actual de algunas operas, pero la música es eterna). Se trata de una representación en el Festival de Salzburgo con primeras figuras de la lírica como el tenor Michael Schade y la soprano Barbara Bonney, dirigidos por Nikolaus Harnoncourt.



                 Y ahora, continuando con la misma representación, vamos con algo mas reposado… tras la explosion de alegria de “Old England” viene la hermosa aria “Fairest Isle” (La mas bella isla) interpretada por Barbara Bonney.




                 “Dido y Eneas”, es la opera capital de Purcell y una de las mas importantes del Barroco. La soprano norteamericana Jessye Norman interpreta "El Lamento de Dido".



¿Y que decir de los contratenores, tan abundantes en la obra de Purcell?
Ojo: las prodigiosas facultades de los contratenores actuales nada tienen que ver con los “castrati” de tiempos pasados. Son unos señores absolutamente normales con una muy depurada técnica vocal. 
Aquí tenemos a uno de los mas eminentes del siglo XX, Alfred Deller y su hijo Mark interpretando “Sound the Trumpet”

                   Ovidio

martes, 6 de marzo de 2012

THE INCREDIBLE STRING BAND - LA BELLEZA DE LO IMPERFECTO













Esta entrada trata de la Incredible String Band, banda escocesa formada por Robin Williamson y Mike Heron, que en 1966 comenzó a fusionar la psicodelia propia de la efervescencia hippie de la época con el folk del que provenían sus miembros.
Poco académicos, tipos cultos, inquietos, imaginativos, eclécticos y demenciales, su carrera resultó un tanto caótica, reflejo de sus peculiares personalidades. Mezclaban canciones propias, tradicionales de las islas o ragas indias en una arriesgada mezcolanza. Como tenían un muy original concepto juglaresco y teatral de la música, aun siendo multiinstrumentistas, desdeñaban la  perfección técnica en aras de la espontaneidad y se trabajaban poco las canciones, lo que se nota sobre todo en la parte vocal. A partir de su quinto disco incorporaron a la banda a sus respectivas parejas, Licorice McKechnie y Rose Simpson. Aun no siendo estas verdaderas profesionales del espectáculo, Licorice tenia un raro magnetismo fisico y vocal que aportó momentos memorables al grupo. (Vease sino la giga en plan amateur que se tira en el vídeo "Irish Jigs" o su parte vocal en "Banks of Sweet Italy") Tras electrificar sus instrumentos (Su peor etapa), se disolvieron a mediados de los 70. 
Hoy en día Robin Williamson, excelente violinista, arpista y narrador de cuentos, es un personaje fuera de tiempo, una especie de bardo perdido en el siglo XXI, que sigue actuando en ámbitos reducidos.

"October Song" pertenece al primer disco, en el que aun se manifestaban con mucha fuerza sus raíces folk. Ahí os queda la excelente letra y la traducción para practicar el inglés mientras la escucháis.



I'll sing you this October song,
Oh, there is no song before it.
The words and tune are none of my own,
for my joys and sorrows bore it.

Beside the sea
The brambly briars in the still of evening,
Birds fly out behind the sun,
and with them I'll leaving.


The fallen leaves that jewel the ground,
They know the art of dying,
And leave with joy their glad gold hearts,
In the scarlet shadows lying.


When hunger calls my footsteps home,
The morning follows after,
I swim the seas within my mind,
And the pine-trees laugh green laughter.


I used to search for happiness,
And I used to follow pleasure,
But I found a door behind my mind,
And that's the greatest treasure.


For rulers like to lay down laws,
And rebels like to break them,
And the poor priests like to walk in chains,
And God likes to forsake them.


I met a man whose name was Time,
And he said, I must be going,
But just how long that was,
I have no way of knowing.


Sometimes I want to murder time,
Sometimes when my heart's aching,
But mostly I just stroll along,
The path that he is taking.

Robin Williamson

TRADUCCION
Voy a cantarte esta canción de Octubre
Oh, Nunca hubo otra igual
Ni las palabras ni la música son mías
Sino que nacen de mis alegrías y penas

Junto al mar,
Las zarzas de brezo en la quietud de la tarde,
Los pájaros se van, volando tras el sol
Y con ellos me iré yo.

Las hojas caídas como joyas sobre la tierra
Conocen el arte de morir
Y parten con la bondadosa alegría de sus áureos corazones
En la yacente sombra escarlata

Cuando el hambre dirige mis pasos al hogar
A la mañana siguiente
Nado los mares dentro de mi mente
Entre la verde risa de los pinos

Yo solía buscar la felicidad
Y solía perseguir el placer
Pero hallé una puerta detrás de mi mente
Y ese es el más grande de los tesoros

Los gobernantes gustan de promulgar leyes
Los rebeldes de romperlas
Los pobres clérigos gustan de caminar encadenados
Y Dios de abandonarlos a todos

Conocí a un hombre que se llamaba Tiempo
Y el dijo “Me tengo que ir”
Pero hasta cuando
No tengo forma de saberlo

A veces, quiero matar el tiempo
A veces, cuando tengo el corazón dolorido
Pero casi siempre acabo paseando a lo largo 
Del camino que él esta tomando

"Water Song" (La Cancion del Agua) pertenece al tercer álbum. Ahí os queda la hermosa letra y su traducción:

Water water see the water flow
Glancing dancing see the water flow
O wizard of changes water water water
Dark or silvery mother of life
Water water holy mystery heaven’s daughter
O, wizard of changes, teach me the lesson of flowing
God made a song when the world was new
Water’s laughter sings it is true
O, wizard of changes, teach me the lesson of flowing

Robin Williamson

TRADUCCION
Agua, agua, mira el fluir del agua
Mirando, bailando, mira correr el agua
Oh, artífice de cambios, agua, agua, agua
Oscura o plateada madre de la vida
Agua, agua, sagrado misterio, hija del cielo
Oh, artífice de cambios, enséñame la lección de fluir
Dios hizo una canción cuando el mundo era nuevo
 La risa del agua la canta, y es verdad
Oh, artífice de cambios, enséñame la lección de fluir   

Ovidio

miércoles, 29 de febrero de 2012

ALGO DE BRASSENS


                         
                             Transcribo el resumen de una semblanza de Georges Brassens escrita por el cantautor aragonés Joaquin Carbonell:

                       El 6 de marzo de 1952, un Brassens desesperado se acercaba hasta el cabaret de la Patachou para mostrarle alguno de los temas que habían nacido de su guitarra. Eran canciones contracorriente, textos iconoclastas, irónicos, obscenos, divertidos, entonadas por un tipo desmesurado con pinta de oso adormecido. Patachou escuchó "La mauvaise reputation" y "Le Gorille" y quedó impresionada; le pidió que volviese al día siguiente para entonar esas canciones. 
                      Al día siguiente debutó y todo París hablaba del "descubrimiento". Desde entonces, este hombre hosco, desgarbado, atractivo y despegado de las tentaciones mundanas, se convirtió en el ídolo musical y personal que una Francia rendida por el cansancio de las guerras, necesitaba. Hoy día, todos los hogares galos poseen al menos un ejemplar discográfico de Brassens. 
                     Brassens fue un anarquista declarado. Un hombre que alcanzó la gloria de ser distinguido con el Premio Nacional de Poesía de la Academia Francesa de la Lengua, desde la contestación de sus textos más viscerales. La anarquía, el amor, el sexo, la ironía y la individualidad, fueron los ejes que marcaron no sólo su obra musical y poética, sino el contorno de su propia vida. Aquellos franceses de postguerra, hacinados en las primeras cadenas de montaje de Citroen, y que sonreían con las edulcoradas historias de Chevalier, fueron los primeros en compartir el espíritu corrosivo de los textos de Brassens.
                    Ese desprecio feroz por toda forma de control, de dominación, encontró terreno abonado  en el espíritu galo que no en vano esculpió aquello de "Libertad, fraternidad, igualdad". Brassens se mofaba de todos los burgueses bienpensantes con los peores insultos que en abundancia posee la lengua francesa. Esa forma de rimar sus pensamientos, esa clarividencia para encontrar un lenguaje popular, directo, humano y divertido, le abrieron el corazón y los hogares de todos sus compatriotas. Brassens ha sido -y sigue siendo- un ídolo, un pedazo del patrimonio telúrico de los franceses. Alguien que siempre vivió alejado del relumbrón del "star system", encerrado en la soledad de Crepières y que una vez al año -por navidades- se acercaba hasta el Bobino a presentar sus canciones comprobando año tras año, cómo las entradas se agotaban con meses de antelación. Alguien le preguntó en cierta ocasión por qué salía a cantar siempre con la pipa en la boca. "Porque soy más fumador que cantante" respondió con lucidez. No era cierto. Brassens fue un magnífico compositor, un apasionado seguidor del jazz, de la tradición musical de tantos guitarristas franceses que han poblado los escenarios. El día que se le reprochó que sus canciones eran monótonas, simples y vulgares, Brassens reunió a sus amigos al frente de Moustache y dejó para el recuerdo un doble album con la versión jazzística de sus éxitos, que asombró a todos los músicos.
    Murió a los 60 años, solo, tal como había vivido, pero rodeado del fervor popular que ni aún hoy le ha olvidado. Enterrado en el cementerio de los pobres de su natal Sète, cerca de donde yace su paisano Paul Valèry, Brassens deja un legado de 12 discos donde el francés medio encuentra la voz de su propio testimonio. La voz de un cantante que sólo se consideró un juglar, un contador de historias: "Tengo verdadero talento para unir unas palabras con otras, pero no creo que se trate de verdadera poesía. Es una especie de habilidad, una ternura que pongo en mis canciones". 
Qué sabía él...
Joaquin Carbonell



Paco Ibañez,  ha sido, a mi juicio, el que mejor ha "versioneado" a Brassens en castellano. Aquí interpreta "La Mala Reputación" que, con su característico humor, resume en pocas estrofas su vena anarquista. 



Uno de los atractivos de Brassens es esa mixtura de escepticismo y candor, crueldad y profundo amor por la condicion humana, acidez y ternura... ¿No es un "Testamento" que produce ganas de vivir?  


 Aqui, un hermoso canto a la amistad y a la verdadera caridad. El titulo original es "Chanson pour L'Auvergnat". El traductor Pierre Pascal, para contextualizar, "trasladó"  el Auvergne francés á nuestro Aragón.


Y ahora veamosla interpretada por su autor. La "sombra" de Brassens era su contrabajista y amigo Pierre Nicolas, que le acompaño en los escenarios durante toda su vida. 


Este vídeo muestra la enorme calidad de la música de Brassens. Aparentemente sencilla y con un leve tono jazzistico, servía de vehículo a sus magnificas letras. Se trata de "Les copains d'abord", otro de sus cantos a la verdadera amistad. Algunos de los amigos aludidos en la letra, aparte de Pierre el contrabajista, están entre el publico.
    

Bueno, ejem... esta de "El Gorila" no es apta para menores. Abstenerse gentes sin sentido del humor, mojigatos, partidarios de la pena de muerte y jueces que mandan aplicarla.   


Esta se titula "Morir por las ideas". Viene diciendo que la idea es excelente, pero hay que morir muy lentamente, para rectificar si por el camino nos damos cuenta que la idea es equivocada, porque ya han muerto tantos en nombre de ideas sin futuro... Ademas... "los charlatanes que predican el martirio, acaban siempre superando la longevidad de Matusalén". 
La traducción completa:

Morir por las ideas, la idea es excelente
yo he estado a punto de morir por no haberla tenido,
pues todos los que la tenían, multitud agobiante,
aullando a la muerte, me han caído encima.
Ellos han sabido convencerme y mi musa insolente,
abjurando de sus errores, se ha unido a su fe
con un poco de reserva en todo caso:
Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de muerte lenta,
de acuerdo, pero de muerte lenta.

Juzgando que no hay peligro en la tardanza,
vayamos hacia el otro mundo ganduleando por el camino,
pues, si forzamos la marcha, sucede que se muere
por unas ideas que no tienen futuro el día de mañana.
Y si hay una cosa amarga, desoladora
al entregar el alma a Dios, es darse cuenta
que hemos equivocado el camino, que nos hemos equivocado de idea:
Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de una muerte lenta
de acuerdo, pero de una muerte lenta.

Los charlatanes que predican el martirio
normalmente, por otra parte, se rezagan aquí abajo.
Morir por las ideas, todo hay que decirlo,
es su razón de vivir, y no se privan de ello.
En casi todas partes se ve que superan
fácilmente a Matusalén en la longevidad,
y yo concluyo que ellos deben decirse, bajito:
“Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de muerte lenta
de acuerdo, pero de muerte lenta”.

A las ideas que reclaman el cacareado sacrificio
las sectas de toda índole les ofrecen retahílas enteras
y la cuestión se plantea a la victimas novatas
morir por las ideas, esta bien, pero por cuál?
Y como todas se parecen entre sí
cuando las ve venir, con su gran bandera,
el sabio titubea y duda delante de la tumba.
Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de muerte lenta
de acuerdo, pero de muerte lenta.

¡Y si aún bastasen algunas hecatombes
para que finalmente todo cambiase, finalmente todo se arreglase!
Después de tantas “grandes noches”(1), de tantas cabezas cortadas,
ya tendríamos el paraíso sobre la tierra.
Pero la edad de oro sin cesar se pospone,
los dioses tienen siempre sed, nunca tienen suficiente
y he aquí la muerte, la muerte que siempre vuelve a empezar...
Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de muerte lenta
de acuerdo pero de muerte lenta.

Oh vosotros, los agitadores, oh vosotros los buenos apóstoles
morid, pues, los primeros, os cedemos el sitio.
Pero por favor, joder! dejad vivir a los demás!
La vida es casi el único lujo aquí abajo
pues, finalmente, la Muerte está siempre vigilante
y no es necesario ayudarle con la guadaña.
¡Basta de danzas macabras alrededor de los patíbulos!
Muramos por las ideas, de acuerdo, pero de muerte lenta,
de acuerdo pero de muerte lenta.




Por ultimo, un claro mensaje para mayores y pequeñitos : "La edad no tiene nada que ver con la gilipollez"

Ovidio